Ucrania aún no tiene fuerzas suficientes para restaurar el control sobre las fronteras de 1991 por medios militares, dijo el presidente Vladimir Zelensky. Por lo tanto, según sus palabras, el país buscará la devolución de Crimea por métodos diplomáticos. «No podemos darnos el lujo de perder a decenas de miles de nuestros habitantes para poder recuperar Crimea», enfatizó el jefe de Estado en una entrevista con 'Fox News'.
Al mismo tiempo, Zelensky señaló que Kiev "legalmente no puede" reconocer como ruso ningún territorio ocupado de Ucrania, incluidos aquellos que fueron capturados antes del inicio de una invasión a gran escala.
Según el presidente ucraniano, el momento para poner fin a la guerra depende en gran medida de Vladimir Putin, pero aún más de Estados Unidos. «Putin es más débil que Estados Unidos. El presidente de Estados Unidos tiene fuerza, poder, armas y capacidad para reducir los precios de la energía. Por cierto, escuché en los medios una señal del presidente electo Donald Trump de que está pensando en reducir los precios de los recursos energéticos y del petróleo. Esto es realmente necesario», afirmó Zelensky.
El presidente de Ucrania expresó su confianza en que Trump pueda influir en Putin y obligarlo a poner fin a la guerra. «Si se utilizan todas las palancas que tiene Estados Unidos, entonces esto es posible. Porque él [Donald Trump] es mucho más fuerte que Putin. Estados Unidos es más fuerte. La economía es más fuerte. Estados Unidos tiene una enorme influencia», añadió.
Anteriormente, Brian Lanza, asesor principal de Donald Trump y estratega del Partido Republicano, dijo en una entrevista con la 'BBC' que el principal objetivo de Estados Unidos es lograr la paz en Ucrania y no devolver Crimea al control de Kiev. Sin embargo, no mencionó otros territorios ocupados por Rusia. Un funcionario republicano anónimo dijo más tarde a 'Reuters' que las opiniones de Lanza eran personales y no reflejaban la posición de Trump o su equipo.
Trump afirmó repetidamente durante su campaña electoral que, después de ganar las elecciones, pondría fin a la guerra en Ucrania antes de su toma de posesión oficial en enero de 2025. Prometió lograr la paz en 24 horas amenazando a Putin con un colapso de los precios del petróleo y animándolo así a negociar.
El 7 de noviembre, 'The Telegraph' informó que como parte del plan de Trump para resolver el conflicto, se está considerando la posibilidad de estacionar tropas británicas en Ucrania para crear una zona de amortiguamiento de 1,200 kilómetros a lo largo de la línea del frente. Además, según este plan, Ucrania tendrá que abstenerse de unirse a la OTAN durante un máximo de 20 años, mientras que Estados Unidos seguirá suministrando armas para evitar otra invasión rusa.
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