Hungría despliega defensas aéreas cerca de Ucrania y denuncia escalada de guerra tras autorización de EEUU de ataques en Rusia

Hungría está desplegando sistemas de defensa aérea cerca de la frontera con Ucrania, citando mayores riesgos después de que Occidente permitió el uso de armas de largo alcance dentro del territorio ruso, dijo el ministro de Defensa, Kristof Szalay-Bobrovniczky, el 20 de noviembre.

El ministro ordenó el despliegue de sistemas de defensa aérea en las regiones del noreste del país, diciendo que «la guerra ha entrado en su fase más peligrosa».

Szalay-Bobrovniczky atribuyó esta escalada en particular a la flexibilización de las restricciones a los ataques ucranianos con armas occidentales y la vinculó a la aprobación por parte del presidente ruso, Vladimir Putin, de una doctrina nuclear actualizada.

Esta decisión llega después de que dos misiles rusos fueran derribados el 17 de noviembre en el óblast de Zakarpatia, la región más occidental de Ucrania, fronteriza con Hungría y donde viven aproximadamente 75,000 personas de etnia húngara.

En esa ocasión, el ministro de Asuntos Exteriores húngaro, Peter Szijjarto, dijo que era necesario «reforzar los esfuerzos para lograr la paz ya que cada día trae consigo el riesgo de una escalada de la guerra».

Budapest ha criticado y obstruido constantemente el apoyo militar occidental a Ucrania, alegando que conduciría a una escalada, y ha mantenido vínculos cálidos con Moscú durante toda la guerra a gran escala.

Anteriormente, los drones y misiles rusos lanzados durante los ataques contra Ucrania han cruzado el espacio aéreo de otros países, a saber, Polonia, Letonia, Rumania, Moldavia y Bielorrusia.

El último acontecimiento en Hungría sigue a una serie de resoluciones cada vez más contundentes por parte de los aliados occidentales de Ucrania.

Después de que el secretario de Estado de Estados Unidos, Antony Blinken, prometiera que la administración Biden reforzaría el apoyo a Kiev antes de la toma de posesión del presidente electo Donald Trump, el presidente Joe Biden permitió el 17 de noviembre que Ucrania utilizara misiles ATACMS para atacar profundamente el territorio ruso.

Según se informa, Ucrania utilizó misiles ATACMS para atacar un arsenal militar ruso en la región de Bryansk el 19 de noviembre y supuestamente también utilizó misiles Storm Shadow suministrados por el Reino Unido el 20 de noviembre, lo que marca el primer caso en el que estas armas se utilizan en suelo ruso.

Otros aliados occidentales han expresado su posición sobre las armas que ellos mismos suministran.

El ministro de Asuntos Exteriores francés, Jean-Noel Barrot, dijo el 18 de noviembre que París "seguía abierto" a permitir que Ucrania utilizara misiles franceses de largo alcance para atacar objetivos militares dentro de Rusia, informó 'Le Monde'.

La primera ministra italiana, Giorgia Meloni, dijo que "entiende" la respuesta de Estados Unidos a Rusia, pero Roma toma una "opción diferente" y se centra en las defensas aéreas de Ucrania.