La comunidad internacional expresó su repudio a los actos de violencia perpetrados por Israel en la Franja de Gaza y el Líbano, con protestas masivas en varios países y fuertes condenas de gobiernos y organizaciones.
En Reino Unido, cientos de manifestantes se congregaron frente a la Embajada de Estados Unidos (EE.UU.) en Londres para condenar el apoyo de los gobiernos británico y estadounidense a Israel.
En otras partes del mundo, como Noruega, Suecia, Berlín, así como en otras naciones europeas y latinoamericanas, también se han registrado protestas.
Los manifestantes exigen el embargo inmediato de armas al régimen israelí, la libre entrada de alimentos e insumos médicos a la Franja de Gaza, y la eliminación de las restricciones que impiden a las ONG llevar a cabo su trabajo humanitario en la región.
Los mismos también portaban pancartas en sus marchas, en las cuales escribieron "Alemania es un socio en el genocidio y el racismo del régimen israelí", "Alto el fuego ahora", "Palestina será libre" o "Manos fuera de Líbano".
También se ha hecho un llamado a la comunidad internacional para que se pronuncie en contra del genocidio que, recalcaron los manifestantes, lleva más de un año azotando a Oriente Medio.
La indignación internacional ha sido unificada por la intensificación de los ataques de Israel, que han dejado un saldo de miles de civiles muertos y heridos en Gaza y el Líbano.
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