Bulgaria: los conservadores muy por delante de las elecciones legislativas pero sin una mayoría para gobernar

Las votaciones en Bulgaria se suceden y son similares. El equilibrio de poder se mantiene sin cambios. Al igual que en las últimas elecciones de junio, el partido Gerb obtuvo el primer puesto con el 26% de los votos, por delante de los liberales proeuropeos de CC/BD (15%) y de los nacionalistas prorrusos de Vazrajdane (13%).

La tasa de participación aumentó ligeramente, situándose en el 35% una hora antes del cierre de las urnas. Hace cinco meses, sólo el 34% de los votantes acudió a votar, el nivel más bajo desde la caída del comunismo hace 35 años.

«La gente quiere un gobierno, estabilidad, seguridad», declaró Boiko Borissov durante su votación por la mañana, tendiendo la mano al resto de la clase política. ¿Pero logrará encontrar aliados para formar una mayoría para gobernar? Ésa es la gran pregunta. Encontrar socios para formar una mayoría estable y nombrar un gobierno está resultando complicado. 

Los nacionalistas prorrusos de Vazrajdane (Renacimiento) se establecieron permanentemente en el panorama político. «Bulgaria debe seguir siendo un país independiente, sin interferencia extranjera», dijo el domingo el presidente de Vazrajdane, Kostadin Kostadinov, refiriéndose a Bruselas y Washington.

Muy presente durante la campaña, Vazrajdane puede promover ante su electorado la adopción este verano por parte del Parlamento, a iniciativa suya, de una ley contra la "propaganda" LGBT+ en las escuelas (un argumentario ya clásico de los partidos de extrema derecha europeos que imitan a Rusia Unida, el partido del presidente Vladímir Putin). Según los analistas, la influencia de Vazrajdane está creciendo hasta el punto de que el partido se está convirtiendo en un socio potencial para Gerb.

Boyko Borisov abrió la puerta a un acercamiento, aunque admitió que sus "socios en Bruselas y Washington" no permitirían tal escenario.