Como parte de sus ataques contra puestos militares israelíes, el movimiento de resistencia libanés, Hezbolá confirmó este pasado martes el ataque con cohetes a un centro de inteligencia israelí en las cercanías de Tel Aviv, y una base naval cerca de la localidad de Haifa.
Hezbolá anunció que lanzó varios cohetes contra «la base Glilot de la Unidad 8200 de Inteligencia Militar» y también indicó haber disparado misiles a la base naval de Stella Maris en el noroeste de la ciudad portuaria de Haifa.
La resistencia libanesa comentó que los ataques a las posiciones militares israelíes estuvieron enmarcados en la operación Jeybar y reiteraron que las agresiones se dieron «en defensa del Líbano y su pueblo, y en respuesta a los ataques del régimen israelí contra poblaciones y civiles».
La unidad de inteligencia militar 8200 del ejército israelí se considera una de las instituciones más importantes relacionadas con el aparato de espionaje del país.
Según Hezbolá, la base Glilot de inteligencia militar actúa en el campo cibernético, por lo que sus datos son usados por los mecanismos militares y de inteligencia de los sionistas.
A lo largo del lunes, el movimiento de resistencia libanesa lanzó una serie de ataques contra los asentamientos y los blancos israelíes en el norte de los territorios palestinos ocupados.
En las últimas semanas, Israel ha intensificado sus ataques contra el Líbano y en respuesta de estas agresiones, Hezbolá ha lanzado cohetes contra varios puntos del territorio israelí en apoyo al pueblo palestino y libanés.
Desde el pasado octubre, los ataques de Israel contra el Líbano han dejado al menos 2,464 muertos y 11,530 heridos, según el Ministerio de Salud libanés.
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