China pide a la OTAN “no crear caos” en Asia y rechaza acusaciones de facilitar la guerra en Ucrania.
El secretario general de la OTAN, Jens Stoltenberg, denunció este jueves, nuevamente, que China se ha convertido en un "facilitador decisivo" de la guerra de Rusia contra Ucrania y que tiene una "asociación sin límites" y un fuerte apoyo a la base industrial de defensa de Rusia.
"Estamos de acuerdo en que China no puede seguir alimentando el conflicto militar más grande de Europa sin que esto afecte los intereses de Pekín", apuntó en una conferencia de prensa en el marco de la cumbre que concluye este jueves en Washington.
Previamente, el gigante asiático emitió este mismo jueves fuertes declaraciones contra la alianza político-militar, ya que el miércole la organización ya había acusado a Beijing de ser un "facilitador decisivo" en la guerra de Rusia contra Ucrania.
"La exageración de la responsabilidad de China en la cuestión de Ucrania por parte de la OTAN no es razonable y tiene motivos siniestros", afirmó el portavoz del Ministerio de Asuntos Exteriores chino, Lin Jian en una rueda de prensa diaria.
A estas declaraciones, se sumó la embajada del Gobierno de Xi Jinping en la Unión Europea que pidió a la alianza político-militar, dirigida por Estados Unidos, que "abandone la mentalidad de la Guerra Fría".
El rechazo del gigante asiático llega un día después de que- en un comunicado en el marco de la cumbre de la OTAN, que concluye este jueves en Washington, los aliados occidentales apuntaran directamente a Pekín como impulsor de la guerra en curso en suelo europeo por su "asociación sin límites" con la economía de Moscú y su apoyo a gran escala a la base industrial de defensa del Kremlin.
"El mensaje enviado por la OTAN desde esta cumbre es muy fuerte y muy claro: estamos definiendo claramente la responsabilidad de China respecto a su facilitación de la guerra de agresión rusa contra Ucrania", afirmó posteriormente el secretario general de la OTAN, Jens Stoltenberg, en una rueda de prensa.
Y es que tras el inicio del conflicto, el comercio chino con Rusia ha aumentado, lo que compensa, al menos parcialmente, el impacto de las sanciones occidentales contra el Kremlin.
Pero la Administración de Xi Jinping insistió este jueves en que sus relaciones económicas con Rusia se basan en las reglas de la Organización Mundial del Comercio.
"El flujo comercial normal entre China y Rusia no tiene como objetivo a terceros y no debe ser objeto de interrupciones o coacciones", subrayó el portavoz de la misión diplomática del gigante asiático en Bruselas.
China también reprochó los señalamientos de la OTAN sobre su presunto respaldo en la industria rusa de armas.
China cuenta con una política de "no proporcionar armas letales a ninguna de las partes en conflicto y de ejercer un control estricto sobre la exportación de bienes de doble uso, incluidos los drones civiles", sostuvo su sede diplomática en Bruselas.
Pero previamente, Estados Unidos y los Estados miembros del G7 han advertido sobre acciones contra las instituciones financieras en China por ayudar a Rusia a obtener armas para la invasión a Ucrania que inició hace más de dos años.
El pasado junio, el mandatario estadounidense, Joe Biden, matizó que China no provee directamente armas a Moscú, pero sí los suministros para producirlas.
"China no está suministrando armas (a Rusia), sino la capacidad de producir esas armas y la tecnología disponible para hacerlo, por lo que de hecho está ayudando a Rusia", afirmó el líder de la Casa Blanca, el pasado 14 de junio, al término de la cumbre del Grupo de los Siete, en Italia.
China intenta desligarse de esas acusaciones y remarca que, por el contrario, ha sido impulsor de un plan de paz entre Kiev y Moscú. China "no es responsable de la crisis en Ucrania y ha reiterado su compromiso con la promoción del diálogo y la búsqueda de una solución política, una postura que ha recibido el respaldo de la comunidad internacional", aseguró su sede diplomática en la UE.
Pero, el plan de 12 puntos propuesto por China en 2023 no ha prosperado. Por el contrario, ha sido rechazado por Ucrania y sus aliados occidentales, debido a los grandes cuestionamientos sobre el rol "neutral" que China ha intentado mostrar, al tiempo que Xi Jinping afianza sus relaciones con el mandatario ruso, Vladimir Putin. Occidente también resaltó que el texto exponía principios generales, pero no entraba en detalles sobre cómo acabar con las hostilidades en suelo ucraniano.
Desde que inició el conflicto, China ha mostrado una posición ambigua. Su Gobierno ha pedido respeto para la integridad territorial de todos los países, incluido Ucrania, pero también respeto para las "legítimas preocupaciones de seguridad", en referencia a Rusia, al tiempo que se rehúsa a condenar la invasión.
Más allá de la guerra en Ucrania, el gigante asiático y la organización transatlántica sostienen amplias reticencias, en medio de las tensiones entre China y Taiwán, que Beijing reclama como parte de su territorio. La isla, que cuenta con un gobierno y Ejército propio, recibe el contundente respaldo de Estados Unidos, lo que eleva la ira del Gobierno chino.
Aunque no mencionó directamente a ese territorio, en su respuesta Beijing también acusó a la alianza occidental de interferir en asuntos de competencia asiática, por lo que pidió a la OTAN “no crear caos” en esa zona geográfica.
"China insta a la OTAN a (...) Dejar de interferir en la política interna de China y de manchar la imagen de China y no crear caos en Asia Pacífico después de crear agitación en Europa", sostuvo Lin.
China ya ha expresado su molestia por las incipientes relaciones de la OTAN con los países de la región, en lo que considera una expansión de la alianza dirigida por EE.UU. en Asia-Pacífico.
En la cumbre que concluye este jueves en la capital estadunidense, están representadas por tercer año consecutivo Japón, Corea del Sur, Australia y Nueva Zelanda, en calidad de socios invitados, mientras China teme una mayor cooperación en materia de seguridad con países con los que ha sostenido tensiones.
Comentarios
Publicar un comentario