Los rebeldes de Myanmar obtuvieron el control de la mayor parte del territorio del país y de la frontera estatal.

El gobierno de Myanmar ha perdido el control de la mayor parte del país, incluida la frontera estatal. Así lo informó 'Reuters' con referencia al informe del Consejo Asesor Especial de Myanmar.

Los movimientos insurgentes étnicos controlan ahora hasta el 86% del territorio, donde vive el 67% de la población de Myanmar. Además, dado que los rebeldes ahora controlan gran parte de la frontera estatal, es posible que los estados vecinos tengan que aumentar su cooperación con las administraciones rebeldes en estas áreas. A su vez, en el ejército de la junta, según la publicación DVB, la deserción ha alcanzado proporciones sin precedentes.

Al mismo tiempo, según un representante de la Oficina del Alto Comisionado de las Naciones Unidas para los Derechos Humanos, en algunos casos la toma de territorios por parte de los rebeldes también conduce a violaciones masivas de los derechos humanos.

Así, a raíz de la captura de las ciudades de Buthidaung y Maungdaw por el ejército de Arakan en Mayo de 2024, cerca de 45,000 representantes del pueblo rohingya se vieron obligados a huir de estos territorios para escapar de ataques e incendios provocados.

Anteriormente, los rohingya fueron sometidos, según varias organizaciones internacionales, a genocidio; en 2017, más de 700 mil representantes de este pueblo se vieron obligados a huir a Bangladesh e Indonesia. En total, según la ONU, en estos momentos más de tres millones de personas en Myanmar se han visto obligadas a abandonar sus hogares debido a las hostilidades y han sido desplazadas dentro del país;

Golpe militar en Myanmar

El 1 de Febrero de 2021, el ejército de Myanmar llevó a cabo un golpe de Estado y tomó el poder en el país. Las protestas contra el nuevo gobierno se llevaron a cabo en todo el país, y durante la represión de estas acciones murieron más de mil quinientos participantes.

El golpe militar puso fin al gobierno de cinco años del partido Liga Nacional para la Democracia en Myanmar y condenó a su líder Aung San Suu Kyi a 33 años de prisión. Posteriormente, la pena se redujo en seis años.
Anteriormente, la junta volvió a posponer las elecciones previstas para Agosto de 2023. El estado de emergencia se ha prorrogado por seis meses.

El ejército también lleva a cabo con frecuencia redadas durante las cuales se mata y tortura a activistas sindicales o de la oposición, y se queman casas e infraestructura civil.

· Fuente: DOXA